Escasean pero se pueden ver en todos los puertos, tejen durante horas las redes bajo las inclemencias del tiempo y no hay maquinaria que pueda sustituir sus ágiles manos que parecen mariposas aleteando sobre el agujereado paño.
Aquí hace tiempo que no las veo, solo algunos hombres remendando en el puerto del Musel, pero recuerdo cuando en el muelle los hacían las mujeres de Cimadevilla. Salu2.
3 comentarios:
Bonito homenaje para unas mujeres que pone mayúsculas a su trabajo.
Un salduo
Aquí hace tiempo que no las veo, solo algunos hombres remendando en el puerto del Musel, pero recuerdo cuando en el muelle los hacían las mujeres de Cimadevilla.
Salu2.
Que interessante ofício... sempre em utilidade... sem parar... sempre atual.
Beijo carinhoso.
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